En realidad, no se me plantó así como así, sino que se me planteó como resultado de otra.
Otra idea precisamente pensando sobre lo que es la pasión, lo que por supuesto, me llevó a mirar la definición en la RAE, que sigue siendo uno de mis referentes en cuanto a dudas lingüísticas, obteniendo este resultado:
pasión.
Y por supuesto, me surgió una pregunta que me pareció obvia... ¿Ser alguien apasionado con algo es tener algún tipo de problema anímico relacionado con gente o aficiones? ¿Por qué la quinta definición da ese cariz tan... preocupante a la pasión?
Es cierto que Jesucristo sufrió la Pasión y que fue un durísimo trance antes de morir, pero alguien apasionado, alguien que disfruta de lo que hace ya sea en el trabajo, cuando sale, cuando come, cuando vive, no es posible que sea un "perturbado" como parece querer describir el ya citado punto cinco.
En todo caso, yo calificaría de perturbados a todos los que no intentan que su vida sea así.
Pero vamos, que será que soy un apasionado escribiendo y estoy perturbado, o que tengo miedo de no aprovechar lo suficiente la vida y es por eso que procuro darlo todo en lo que hago y procuro hacer las cosas con pasión o como mínimo con cariño, y estoy loco, que viendo como va el mundo y los giros más raros que da últimamente, nunca se sabe.
Que si estoy loco me lo digan, aunque no vaya a cambiar.
No comments:
Post a Comment