He descubierto que tengo más capacidad de perder el tiempo que de aprovecharlo y más capacidad de arrepentirme que de cambiar. Pero por suerte, hay veces que me parece que un día me cunde como una semana. Y ha habido alguna vez que veinte días me cundieron como varios meses.
Simplemente he descubierto que la complejidad que le sea conferida a un texto no es, ni mucho menos, correspondiente a la complejidad que él describe y que algo tan simple como un "Te quiero" puede ser lo más complicado de decir en la vida.
Simplemente decir que siento no haber escrito, ni en el blog ni en facebook, ni por e-mail, ni por correo postal.
Sé que sabes a quien me refiero, y sé que sólo alguien que se dé por aludido de verdad lo sabe.
Simplemente tenía que decir que te echo muchísimo de menos. Simplemente que te quiero.
Simplemente eso.
Que simples sabemos ser a veces.
